"No hay peor mentira, que una verdad mal entendida" (William James)
Ingredientes: 4 personas
1 cebolla
1 pimiento verde
1 kilo de tomates maduros
2 dientes de ajos
1/2 barra de pan duro
1 manojo de hierbabuena
Sal y pimienta
aceite y agua
Huevos duros para adornar
Modo de hacerlo:
En una sarten grande, se pone un chorro de aceite y se refríen, los ajos, la cebolla, y el pimiento muy picadito,
en un bol ponemos un trozo de pan preferiblemente de pan de pueblo, como este que es de una hogaza de Peñaflor, lo cubrimos de agua y lo dejamos remojando,
sacamos el pan a un colador y dejamos que escurra mientras que vamos haciendo los tomates en una sarten, a la que ponemos un chorro de aceite y echamos los tomates pelados y picados en cuadraditos,
los tomates los dejamos hacer a fuego lento hasta que esten bien cocinados,
(en este punto se puede triturar si te gusta una salsa liquida) se añade el pan remojado, se añade un poco de agua (mejor si tienes caldo) si esta muy espeso,
añadimos el refrito de cebolla que tenemos aparte y mezclamos todo, si os gusta con tropezones (como nos gusta a nosotros) solo machacarlo todo con la mano del mortero, si quereis mas fino pasarlo por la minipimer,
se salpimenta y se deja hacer unos minutos mas a fuego lento, se prueba de sal y se le pone una rama de hierbabuena,
Tiene que quedar espesito, pero para comer con cuchara. Esta receta era la que hacia mi madre y al tomarla me trae recuerdos muy entrañables.
Se pueden añadir casi al final, unas gambas peladas (opcional). En este caso puse unos huevos duros, eso es al gusto de cada uno.
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